La vida es una piñata

Esta obra de Ismael Cala, nos invita a reflexionar acerca de la manera en la cual nos desenvolvemos ante las diferentes situaciones que se nos puedan presentar en nuestras vidas. El utiliza la metáfora de la piñata y su contenido para destacar la importancia que le damos tanto a los bienes materiales como espirituales en nuestra vida, y además añade cartas de distintos lectores como tú o yo, acerca de sus vivencias personales sobre las piñatas en sus vidas. Personalmente me gustó mucho la última parte del libro donde integra 7 llaves para la vida, que nos invitan a ponerlas en acción cada día para mejorar nuestra perspectiva ante esta y ser cada día más felices.

Me encanta que nos invite a vivir con los cambios, con la evolución diaria de nuestras vidas y a saber sobrellevarlo a través de la resilencia. Este es sin duda un libro de esos en los que tu vida se divide en antes y después de leerlo, así que te invito a disfrutar de esta obra. Aquí te dejo mis frases preferidas de este libro:

"La resilencia es fundamental porque nos invita a ser flexibles, agradecidos y recursivos con los elementos que nos caen de nuestra piñata de vida”.

“La resilencia es la capacidad de los seres vivos para sobreponerse a situaciones de dolor emocional y a situaciones adversas”.

“Practicar resilencia implica un profundo autoconocimiento. Una visión del mundo donde veamos oportunidades por todas partes, incluso frente a los problemas. Incluye rodearnos de personas capaces de aportar ideas y soluciones, formar equipos de trabajo basados en la eficiencia y en el conocimiento compartido. Los resilentes se caracterizan por su creatividad y no pretenden vivir con todos los problemas resueltos. La incertidumbre también les anima, les fortalece”.

“Todos tenemos la capacidad y la oportunidad de cultivar la gratitud. Solo necesitamos dedicar unos minutos para agradecer lo que tenemos, en lugar de quejarnos por las cosas que pensamos que merecemos y no tenemos. Desarrollar una actitud de gratitud es una de las formas más sencillas para sentirnos satisfechos con la vida”.

“Usa la gratitud para mirar lo que la piñata de la vida te está lanzando”.

“Con humildad podríamos admirar las piñatas ajenas, entendiendo que nuestro verdadero valor no está en el atractivo y deslumbrante envoltorio de la piñata, sino en las herramientas y capacidades de quien se sirve de ella como fuente de ingenio, innovación y creatividad”.

“El verdadero éxito en la vida radica en cuánto somos capaces de aportar de nuestra piñata a los demás. Añadir valor constantemente a otros nos convierte en generosos y plenos”.

“No dejemos que la piñata de la vida nos sorprenda con lo que nos lanza, sin al menos crear un escudo de protección con el poder de la intención. Cuando decretas una intención de amor y compasión, es muy difícil que la piñata, por muy escasa que sea su provisión, no te recompense con paz, calma, quietud y dicha, aún en medio del caos exterior”.